El Cabanyal, la alcaldesa y el maremoto por Amadeu Frabegat (diario Levante)
Aquí en Madrid no andamos muy informados sobre el lío jurídico del Cabañal, aunque las teles ya disfrutan sacando ancianitas expoliadas y a la alcaldesa Barberá en plan Cruela de Vil. Pero el periodismo consiste en ignorar un asunto y escribir con desenvoltura sobre el mismo. No entiendo la obsesión de Rita por allanarle el camino al mar, sirviéndole en bandeja una gran avenida. Sin barrera alguna, la consumación del cambio climático, o el correspondiente maremoto, que en zona sísmica estamos, pondrá cualquier día a la Malvarrosa en las puertas de Viveros.
Aquí en Madrid no andamos muy informados sobre el lío jurídico del Cabañal, aunque las teles ya disfrutan sacando ancianitas expoliadas y a la alcaldesa Barberá en plan Cruela de Vil. Pero el periodismo consiste en ignorar un asunto y escribir con desenvoltura sobre el mismo. No entiendo la obsesión de Rita por allanarle el camino al mar, sirviéndole en bandeja una gran avenida. Sin barrera alguna, la consumación del cambio climático, o el correspondiente maremoto, que en zona sísmica estamos, pondrá cualquier día a la Malvarrosa en las puertas de Viveros.
Aquí en Madrid no andamos muy informados sobre el lío jurídico del Cabañal, aunque las teles ya disfrutan sacando ancianitas expoliadas y a la alcaldesa Barberá en plan Cruela de Vil. Pero el periodismo consiste en ignorar un asunto y escribir con desenvoltura sobre el mismo. No entiendo la obsesión de Rita por allanarle el camino al mar, sirviéndole en bandeja una gran avenida. Sin barrera alguna, la consumación del cambio climático, o el correspondiente maremoto, que en zona sísmica estamos, pondrá cualquier día a la Malvarrosa en las puertas de Viveros.